[PDF] Carlos González BÉSAME MUCHO





Previous PDF Next PDF



Besame Mucho - Bas en Sax

œ ‰ œ . œ. > .œ ‰ Ó œ œ œ. ˙. ˙. &. #. 46 œ. ‰. J œ. > J œ .œ. > œœ œ# œ. › œb œ œ. œ œ. 3 œ. ‰. J œ. > ˙. U. Besame Mucho comp. C. Velazquez arr. Juan R. Arias.



BESAME MUCHO

Besame Mucho. Besame besame mucho



BESAME MUCHO

Dearest one if you should leave me



Besame Mucho Chords (2022) - web.mei.edu

Besame Mucho Chords. Downloaded from web.mei.edu by guest. JANIYA SANTIAGO. Related with Besame Mucho Chords: • Antonomasia Examples In Literature.



Bésame mucho Bésame mucho

Bésame mucho. Coro Vocalis corovocalis.wordpress.com. 5. 11. S. A. T. B. S. B. Bass. Tenor. B. T. Alto. Soprano. A. Apasionado. S. Consuelito Velázquez. Arr.



Havana Music

Besame mucho. ©. Fin. Bolero. Cha-Cha-CHa. Compositor: Consuelito Velázquez. Intro. A la Voz y de a. Arreglos: Darién Pérez Muñoz. (Opcional) Solos desde (A) 



Besame mucho.Letra

BESAME MUCHO. Autora:Consuelo Velazquez. Bésame bésame mucho. Como si fuera esta la noche la última vez. Bésame



Besame Mucho

Page 1. 5. Besame Mucho. 9. Consuelo Velázquez. 13. 17. 21.



8 Bésame Mucho

Bésame Mucho. Alto Saxophone. =105. Bm. Em. Em(maj7). Em7/D. 13. 17. F#m (b5). #.6. 6. B7(69). Bm. 21. Bm/A. 6. G13. 2. 8. As Recorded By Kenny G. On Soprano 



Bésame mucho

l l l l l l l l l l l. BÉSAME MUCHO / Hoja: 2/4. Coral Hilarión Eslava. (Edición. J. Blasco) http://coralhilarioneslava.iespana.es. Page 3. “ “ “ “ “ “ “ “ “ “.



Bésame mucho

Bésame mucho. Coro Vocalis corovocalis.wordpress.com Ed. Moisés G. Chamorro. Canción Mexicana. Bésame mucho ... Bésame mucho. Coro Vocalis.



Havana Music

Am9 Bm7 E(b13) D13 rubato. ??? ?. ????. ?. C13. ?. Am9 a tempo. ?. Am9. ?. Dm. ?. Dm9. %. Gtr. 7. ?. Dm A(+5). ?. B?° B?. ?. C°. ?. C°.



¡BÉSAME! ¡BÉSAME MUCHO…!

¡BÉSAME! ¡BÉSAME MUCHO…! RAYUELA



Havana Music

Besame mucho. ©. Compositor: Consuelito Velazquez. Bolero. Intro. FIN. A la Voz y de a. Cha-Cha-Cha. Arreglos: Darién Pérez Muñoz.



Besame mucho

Bm9 C?m7 F?(b13) E13 rubato. ?. ?. ?. D13. ?. Bm9 a tempo. ?. Bm9. ?. Em. ?. Em9. %. ??. B? Cl. 7. ?. Em B(+5). ?. C° C??. ?. D°. ?.



Havana Music

Am9 Bm7 E(b13) D13 rubato. ?. ?. ?. C13. ?. Am9 a tempo. ?. Am9. ?. Dm. ?. Dm9. > Bass. 7. ?. Dm A(+5). ?. B?° B?. ?. C°. ?. C°.. ?.



Carlos González BÉSAME MUCHO

Los padres jóvenes e inexpertos público habitual de los libros de puericultura (con el segundo hijo sueles tener menos fe en los expertos y menos tiempo para.



fin de año

31/12/2021 y lubina marinada con tostadas pan de masa madre. Segundo. Crêpe de cangrejo real. Principal (a elegir). Arroz caldoso de carabineros.



BESAME MUCHO

œœ ?. ? .?. Œ. &. # .. 41. 3 œœœ. 3 œœœ. 3 œ œœ. 3 œ œœ# 1w. ? œŒ 2w. ? œŒ. BESAME MUCHO. CONSUELO VELAZQUEZ. MODERATO. PARTICHELA DE DOLÇAINA. BSSNS. DOLÇ.



Besame mucho Trompeta

Bm9 C?m7 F?(b13) E13 rubato. ?. ?. ?. D13. ?. Bm9 a tempo. ?. Bm9. ?. Em. ?. Em9. %. ??. B? Tpt. 7. ?. Em B(+5). ?. C° C??. ?. D°. ?.

Carlos González

BÉSAME MUCHO

Primera edición: marzo de 2003

Segunda edición: abril de 2003

Tercera edición: mayo de 2003

Cuarta edición: septiembre de 2003

Quinta edición: enero de 2004

Sexta edición: junio de 2004

El contenido de este libro no podía ser

reproducido, ni total ni parcialmente, sin el previ permiso escrito del editor.

Todos los derechos reservados.

Colección: VIVIR MEJOR

© Carlos González, 2003

© Ediciones Temas de Hoy, S.A. (T.H), 2003

Paseo de Recoletos, 4. 28001 Madrid

www.temasdehoy.es Diseño de colección: Pep Carrió y Sonia Sánchez

Diseño y foto de cubierta: Luis Sanz

ISBN: 84-8460-262-1

Depósito legal: M. 24.327-2004

Compuesto en J. A. Diseño Editorial, S. L.

Impreso en Lável, S. A.

Printed in Spain-lmpreso en España

ÍNDICE

PARTE I

El niño bueno y el niño malo

LA PUERICULTURA ELÁSTICA

HACIA UNA PUERICULTURA ÉTICA

23
27
30

PARTE II

Porqué los niños son así

SELECCIÓN NATURAL Y SELECCIÓN CULTURAL 43 CÓMO CRÍAN A SUS HIJOS LOS ANIMALES 49 Espabilados o desvalidos 49 Esconder, llevar, seguir 52 EN EL REGAZO DE LA HUMANIDAD 58 PORQUÉ NO QUIEREN QUEDARSE SOLOS 60 PORQUÉ LLORAN EN CUANTO DEJAS LA HABITACIÓN 62 LA RESPUESTA A LA SEPARACIÓN 69 No quiere ir a la guardería 77 PORQUÉ SIEMPRE QUIEREN BRAZOS 80

PORQUÉ NO QUIEREN DORMIR SOLOS 82

Extraños en la noche 83 En la noche de los tiempos 85 Un planeta, dos mundos 87 Por qué se despierta más que antes 88 El colecho en la práctica 93 ¿A qué edad dormirá solo? 96

POR QUÉ LLAMAN NUESTRA ATENCIÓN 98

¿Y AHORA POR QUÉ NO CAMINA? 107

POR QUÉ TIENEN CELOS 115 EL COMPLEJO DEL PADRE DE EDIPO 119 ¿CUÁNDO SE HARÁ INDEPENDIENTE? 122

SU HIJO ES BUENA PERSONA 124

Su hijo es desinteresado 125

Su hijo es generoso 126

Su hijo es ecuánime 130

Su hijo sabe perdonar 131

Su hijo es valiente 132

Su hijo es diplomático 133

Su hijo es sincero 134

Su hijo es sociable 136

Su hijo es comprensivo 137

PARTE III

Teorías que no comparto

LA PUERICULTURA FASCISTA 141

EL ORDEN 148

LA EDUCACIÓN CONDUCTISTA 152

ALGUNOS MITOS EN TORNO AL SUEÑO 160

Dormir de un tirón. 160

Los peligros del colecho 163

El colecho no produce insomnio 164 El colecho no causa problemas psicológicos 169 El colecho no causa la muerte súbita 171

Mamar por la noche 174

¿Qué es el insomnio infantil? 177 Enseñar a los niños a dormir 178

Un hábito muy difícil de romper

Dejarlo solo cuando aún está despierto

Los niños, la cama y el sexo

EL LLANTO TERAPÉUTICO

FAMILIA, SOCIEDAD LIMITADA

Una niña sin límites

La permisividad: miedo a la libertad

PROTEGELLA Y NO ENMENDALLA

U NA BOFETADA A TIEMPO

Un experto en pegar a los niños

EL CASTIGO

BUSSCANDO PROBLEMAS

INSULTA, QUE ALGO QUEDA

EL CONTROL DE ESFÍNTERES

Cuándo y cómo quitar los pañales

SE MIRA, PERO NO SE TOCA

¡TIEMPO FUERA!

LA ESTIMULACIÓN PRECOZ

EL TIEMPO DE CALIDAD

183
186
190
191
194
195
204
207
212
221
228
229
234
238
243
249
253
260
265

EPÍLOGO

El día más feliz

BIBLIOGRAFÍA

269
273

A Joana,Daniel, Sara y Marina,

que me enseñaron a ser padre

AGRADECIMIENTOS

El autor da las gracias a Alicia Bair-Fassardi, Joana Gue- rrero, Rosa Jové, Lourdes Martínez, Maribel Matilla, Pilar Serrano, Mónica Tesone, Eulalia Torras, Patricia Trautmann- Villalba y Silvia Wajnbuch por sus valiosos comentarios al manuscrito. Los testimonios de madres citados en este libro provienen de cartas enviadas al autor, la mayoría a través de la revista Ser Padres, y de foros públicos en Internet. Se han cambiado los nombres para proteger la intimidad de los protagonistas.

PARTE I

EL NIÑO BUENO Y EL NIÑO MALO

Hemos tomado prestado este título de un cuento de Mark Twain no para hablar, como él, de dos niños concretos, sino de todos y cada uno de los niños, del Niño en general. ¿Son los niños buenos o malos? Pues de todo habrá, pensará el lector. Cada niño es distinto, y probablemente la mayoría, lo mismo que los adultos, serán normales tirando a buenos. Sin embargo, y dejando aparte los méritos propios de cada niño, mucha gente (padres, psicólogos, maestros, pediatras y público en general) tiene una opinión predeterminada y gene- ral sobre la bondad o maldad de los niños. Son "angelitos» o pequeños tiranos»; lloran porque sufren o porque nos toman el pelo; son criaturas inocentes o "saben latín»; nos necesitan o nos manipulan. De esta concepción previa depende que veamos a nuestros propios hijos como amigos o enemigos. Para unos, el niño es tierno, frágil, desvalido, cariñoso, inocente, y necesita nuestra atención y nuestros cuidados para convertirse en un adulto encantador. Para otros, el niño es egoísta, malvado, hostil, cruel, calculador, manipulador, y sólo si doblegamos desde el principio su voluntad y le imponemos una rígida disciplina podremos apartarlo del vicio y convertirlo en un hombre de provecho. 17 Estas dos visiones antagónicas de la infancia impregnan nuestra cultura desde hace siglos. Aparecen en los consejos de parientes y vecinos, y también en las obras de pediatras, edu- cadores y filósofos. Los padres jóvenes e inexpertos, público habitual de los libros de puericultura (con el segundo hijo sueles tener menos fe en los expertos y menos tiempo para leer), pueden encontrar obras de las dos tendencias: libros sobre cómo tratar a los niños con cariño o sobre cómo aplastarlos. Los últimos, por desgracia, son mucho más abundantes, y por eso me he decidido a escribir éste, un libro en defensa de los niños. La orientación de un libro, o de un profesional, raramente es explícita. En la solapa del libro tendría que decir claramente: "Este libro parte de la base de que los niños necesitan nues- tra atención», o bien: "En este libro asumimos que los niños nos toman el pelo a la más mínima oportunidad. » Lo mismo deberían explicar los pediatras y psicólogos en la primera visi- ta. Así, la gente sería consciente de las distintas orientaciones, y podría comparar y elegir el libro o el profesional que mejor se adapta a sus propias creencias. Consultar a un pediatra sin saber si es partidario del cariño o de la disciplina es tan absur- do como consultar a un sacerdote sin saber si es católico o budista, o leer un libro de economía sin saber si el autor es capitalista o comunista. Porque de creencias se trata, y no de ciencia. Aunque a lo largo de este libro intentaré dar argumentos a favor de mis opi- niones, hay que reconocer que, en último término, las ideas sobre el cuidado de los hijos, como las ideas políticas o reli- giosas, dependen de una convicción personal más que de un argumento racional. En la práctica, muchos expertos, profesionales y padres ni siquiera son conscientes de que existen estas dos tendencias, y 18 no se han parado a pensar cuál es la suya. Los padres leen libros con orientaciones totalmente diferentes, incluso incom- patibles, se los creen todos e intentan llevarlos a la práctica simultáneamente. Muchos autores les ahorran el trabajo, pues ya escriben directamente híbridos contra natura. Son los que te dicen que tomar al niño en brazos es buenísimo, pero que nunca lo cojas cuando llora porque se acostumbra; que la leche materna es el más maravilloso alimento, pero que a partir de los seis meses ya no alimenta; que los malos tratos a los niños constituyen un gravísimo problema y un atentado a los derechos humanos, pero que un cachete a tiempo hace maravillas... Vamos, "libertad dentro de un orden». Veamos un ejemplo clásico, en la obra del pedagogo Pedro de Alcántara García, que escribía hace casi un siglo, citando al filósofo Kant 1 Tan perjudicial puede ser la represión constante y exagerada, como la complacencia continua y extremosa. Kant nos ha deja- do dicho a este respecto: "No debe quebrantarse la voluntad de los niños, sino dirigirla de tal modo que sepa ceder a los obstá- culos naturales - los padres se equivocan ordinariamente rehu- sando a sus hijos todo lo que les piden. Es absurdo negarles sin razón lo que esperan de la bondad de sus padres - . Mas, de otra parte, se perjudica a los niños haciendo cuanto quieren; sin duda que de este modo se impide que manifiesten su mal humor, pero también se hacen más exigentes. » La voluntad se educa, pues, ejercitándola y restringiéndola, por el ejercicio y la repre- sión, positiva y negativamente. En conjunto, estos párrafos parecen bastante razonables, y bastante favorables al niño (aunque la palabra "represión» hoy en día chirría un poco, ¿verdad? Seguimos reprimiendo a los 19 niños, pero preferimos decir que los formamos, encauzamos o educamos). Todo depende de qué se considere una "com- placencia extremosa». No hay que negarles cosas sin razón, pero si un niño se va a tirar por la ventana, desde luego que no se lo hemos de permitir. Todos de acuerdo. Pero, ¿por qué precisamente al hablar de los niños hay que acordarse de esas limitaciones? Tampoco permitiríamos que se tirase por la ventana un adulto, ya sea nuestro padre o nuestro hermano, nuestra esposa o nuestro marido, nues- tra jefa o nuestra empleada. Pero eso es tan lógico que, al hablar de personas adultas, no creemos necesario hacer la aclaración. Sustituya en los párrafos anteriores al hijo por la esposa: "En la vida conyugal, tan perjudicial puede ser la represión constante y exagerada, como la complacencia con- tinua y extremosa. Se perjudica a las mujeres haciendo cuan- to quieren; sin duda que de este modo se impide que mani- fiesten su mal humor, pero también se hacen más exigentes. » En dos frases las ha llamado exigentes y malhumoradas. ¿A que da rabia? Durante siglos, la mujer ha estado "naturalmente» someti- da al marido, y se escribían frases similares sin que nadie se escandalizase. Hoy nadie se atrevería a hablar así de las muje- res, pero todavía nos parece normal hacerlo de los niños. Pensará algún lector que estoy cogiendo las cosas muy por los pelos, que tampoco es para tanto, que estoy sacando de contexto las frases de Pedro de Alcántara y que él en realidad era muy respetuoso con los niños. Pero es que aquello no era más que el principio. Unas pocas páginas más adelante lee- mos: Para contener estos impulsos y evitar la formación de semejan- tes hábitos, precisa oponer resistencia a los deseos de los niños, 20 contrariar sus caprichos, no dejarles hacer todo lo que quieran ni estar con ellos tan solícitos como suelen estar muchos padres a sus menores indicaciones. Aquí ya no estamos hablando de impedir que el niño jue- gue con una pistola, pegue a otro niño o rompa un jarrón, estamos hablando de no dejarle hacer lo que quiere "porque sí», por el puro placer de contrariarle, cuando acaba de decir que "Es absurdo negarles sin razón lo que esperan». Parece que ni el autor ni sus lectores se daban cuenta de que había una contradicción. Mucha gente se siente atraída por estas posiciones indefini- das, por el "sí, pero... » y por el "no, aunque... », pues está muy extendida en nuestra sociedad la idea de que los extre- mos son malos y en el medio está la virtud. Pero no es así, al menos no en todos los casos. La virtud está, muchas veces, en un extremo. Un par de ejemplos en los que quiero creer que todos mis lectores coincidirán: la policía jamás debe torturar a un detenido, el marido jamás debe golpear a su esposa. ¿Le parece que estos "jamases» resultan demasiado extremistas, tal vez fanáticos? ¿Debería adoptar una postura intermedia, más conciliadora y comprensiva, como torturar poquito y sólo a ase- sinos y terroristas, o pegar a la esposa sólo cuando ha sido infiel? Rotundamente no. Pues bien, del mismo modo, no estoy dispuesto a aceptar que "un cachete a tiempo» sea otra cosa que malos tratos, ni conozco ningún motivo por el que haya que hacer caso a los niños de día pero no de noche. El libro que tiene usted en sus manos no busca el "justo medio», sino que toma claro partido. Este libro parte de la base de que los niños son esencialmente buenos, de que sus necesi- dades afectivas son importantes y de que los padres les debe- mos cariño, respeto y atención. Quienes no estén de acuerdo 21
con estas premisas, quienes prefieran creer que su hijo es un "pequeño monstruo» y busquen trucos para meterlo en vere- da, encontrarán (por desgracia, pienso yo) otros muchos libros más acordes con sus creencias. Este libro está a favor de los hijos, pero no debe pensarse por ello que está en contra de los padres, pues precisamente sólo en la teoría del "niño malo» existe ese enfrentamiento. Quienes atacan al niño parecen creer que así defienden a los padres ("un horario rígido para que tú tengas libertad, lími- tes para que no te tome el pelo, disciplina para que te respe- te, dejarlo solo para que puedas tener tu propia intimidad... »); pero se equivocan, porque en realidad padres e hijos están en el mismo bando. A la larga, los que creen en la maldad de los niños acaban atacando también a los padres: "No tenéis voluntad, lo estáis malcriando, no seguís las normas, sois débiles... » Pues la tendencia natural de los padres es la de creer que sus hijos son buenos, y tratarlos con cariño. Una vez llegué demasiado pronto a mi consulta y me entretuve charlando con el recepcionista. En la sala sólo había una madre, con un bebé de pocos meses en un cochecito, esperando para otro cole- ga. El bebé se puso a llorar, y la madre intentó calmarlo moviendo el cochecito adelante y atrás. Cada vez los llantos eran más desesperados, y los paseos de la madre más frenéti- cos. Cuando un niño llora con todas sus fuerzas, los minutos parecen horas. "¿Qué hace? - pensé - . ¿Por qué no lo saca del coche y lo toma en brazos?» Esperé y esperé, pero la madre no hacía nada. Finalmente, aunque nunca he sido ami- go de dar consejos no solicitados, me decidí a lanzar una indi- recta lo más suave que pude: - ¡Pero qué enfadado está este niño! Parece que quiere brazos... 22
Y entonces, como movida por un resorte, la madre se aba- lanzó a sacar del coche a su hijo (que se calmó al instante) y explicó: - Es que como dicen los pediatras que no es bueno coger- los... ¡No se atrevía a tomar a su hijo en brazos porque había un pediatra delante! Aquel día comprendí cuánto poder tene- mos los médicos y cuántas presiones y temores deben sopor-quotesdbs_dbs26.pdfusesText_32
[PDF] Besame mucho (Consuelo Velasquez) - Anciens Et Réunions

[PDF] besame mucho - Comme un Soleil - Anciens Et Réunions

[PDF] Besame Mucho - Le Souffle des Ondes - Anciens Et Réunions

[PDF] Besame mucho - Thierry Portal - Anciens Et Réunions

[PDF] Besame mucho - WordPress.com

[PDF] Besame mucho en - Anciens Et Réunions

[PDF] besanceuil - Office de Tourisme de Cluny et du Clunisois - France

[PDF] besançon - Euro Dogshows

[PDF] Besançon - Témis microtechniques - De L'Automobile Et Des Véhicules

[PDF] Besançon - ZAC Châteaufarine - Gestion De Projet

[PDF] Besançon : c`est le grand soir - Festival de musique de Besançon

[PDF] Besançon : quand la filière scientifiqueséduit les filles

[PDF] Besançon GraY - Monts Jura Autocars - Anciens Et Réunions

[PDF] BESANÇON GRAY L`HERMITAGE A LAUSANNE FONDATION - Musées Et Galeries D'Art

[PDF] Besançon le 22 mai 2015 Le Proviseur A Mesdames et Messieurs